Varios incendios forestales en el sureste de Brasil llevaron a declarar alerta máxima en 30 de ciudades del estado de Sao Paulo, donde el fuego interrumpió carreteras y el humo alcanzó la capital paulista.
Condiciones atmosféricas con temperaturas que superaron los 35 ºC y baja humedad, sumadas a una prolongada sequía en la región, propiciaron los fuegos en el noroeste del estado más poblado de Brasil, de 44 millones de habitantes.
"Actualmente tenemos 30 ciudades en alerta máxima por grandes incendios y estamos trabajando para controlar la situación y garantizar la seguridad de las personas", dijo el gobernador Tarcísio de Freitas en la red social X.
Las autoridades locales dijeron que dos trabajadores de una fábrica en el municipio de Urupés, en el norte del estado, murieron mientras intentaban combatir un incendio.
La situación era crítica en Sao José do Rio Preto, una ciudad de 480.000 habitantes donde en los últimos cuatro días se registraron más de 335 focos de incendio y las clases fueron suspendidas, según la prensa local.