La NASA atrasó hasta el próximo lunes 5 de septiembre el lanzamiento desde Cabo Cañaveral (Florida) de la misión lunar no tripulada Artemis I, debido a una fuga detectada en el conducto para proveer de combustible al cohete SLS. En concreto, el equipo a cargo descubrió una fuga de hidrógeno líquido.
Se trata del segundo aplazamiento por razones técnicas de la misión que marca el inicio de la carrera para una futura colonización del satélite terrestre.
La ventana para el lanzamiento de este lunes, de 90 minutos, se abrirá a las 17:12 hora local (21.12 GMT) y la del martes a las 18.57 hora local (22.57 GMT), de solo 24 minutos.
Si después del martes el cohete SLS sigue en tierra, tendrá que regresar al Edificio de Ensamblaje de Vehículos para volver a probar su sistema de vuelo.
Cabe recordar que el primer intento de lanzamiento tuvo lugar el 29 de agosto, pero fue cancelado debido a un fallo en uno de los 4 motores RS-25 del poderoso cohete SLS, que mide 98 metros de altura y costó unos 4.100 millones de dólares.
Sobre el problema detectado este sábado, la NASA explicó que "los equipos encontraron una fuga de hidrógeno líquido mientras cargaban el propulsor en la etapa central del cohete Space Launch System (SLS)".
Los "múltiples esfuerzos" para solucionar el problema mediante la recolocación del sello no sirvieron, como se comprobó al volver a bombear el combustible hacia el cohete, por lo que "el director de lanzamiento canceló el intento previsto para hoy", señaló la agencia espacial en un mensaje en la web de la misión Artemis.
El objetivo de la primera misión Artemis es poner a prueba las capacidades del SLS y de la nave Orión, antes de un viaje tripulado previsto en principio para 2024.