El jefe del grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, mandó a su ejército de mercenarios tomar la ciudad rusa de Rostov la mañana de este sábado 24 de junio. Pero no se conformó con eso: quería que cayera el ministro de Defensa, Serguei Shoigu, para lo que avanzó hacia Moscú en su denominada "Marcha de la Justicia" antes de decidir detenerse tras la mediación de Bielorrusia.
Por supuesto, las reacciones de Putin, su Gobierno y sus aliados no se hicieron esperar: "Cualquier agitación interna es una amenaza mortal para nuestro estado, para nosotros como nación. Es un golpe para Rusia, para nuestro pueblo. Y las medidas para defender a la Patria contra tal amenaza serán duras", dijo Putin en su discurso a la nación el sábado. Advirtió a Prigozhin, a quien calificó de traidor, y a los mercenarios de Wagner de que tendrían que responder por sus acciones ante la ley y ante el pueblo ruso.
La retórica estatal rusa volvió a resonar
El presidente del parlamento ruso, Vyacheslav Volodin, escribió: "La Duma, que representa los intereses de los ciudadanos de la Federación Rusa, defiende la consolidación de las fuerzas, apoya al presidente Putin, nuestro comandante en jefe". "Los combatientes de Wagner deben tomar la única decisión correcta: ponerse del lado del pueblo, ponerse del lado de la ley para proteger la seguridad y el futuro de su patria, cumplir las órdenes del comandante supremo", añadió.
Vladimir Solovyov, el principal exponente de la propaganda estatal rusa, escribió: "Hoy no se habla de otra cosa, de qué está pasando en casa, en el interior del país. 25.000 hombres serían muy útiles en el frente. Es necesaria una marcha, sí, pero a Lviv, a Kiev, e incluso más lejos si es necesario. ¡Amigos, retomen el sentido! El enemigo está ahí fuera, en Ucrania. Hay que combatir el nazismo en Ucrania. Detengan esto antes de que sea demasiado tarde. No queremos perder el país. No hay nada peor que una guerra civil".
El presidente ruso anunció reforzó las medidas de seguridad en Rostov, pero también en Moscú, donde se han asegurado edificios administrativamente importantes, circulan vehículos blindados por las calles y se han tomado medidas antiterroristas. Alexey, un moscovita, informa sobre su viaje al trabajo en el sur de la ciudad: "La policía cerró todos los carriles excepto uno, por lo que había una gran acumulación de vehículos. Revisaron mis documentos y sólo dejaron circular automóviles con matrícula de Moscú. ¡Sólo puedes entrar al centro de Moscú con una matrícula de Moscú!".
Vitaly, que tiene su casa de campo cerca de la base aérea de Kubinka (a unos 70 km de Moscú), tiene menos ganas de hablar. "Estoy preocupado. ¿Qué pasa si Kubinka ahora también se convierte en un objetivo de la guerra?". Y no quiso decir más sobre sus propias emociones.
¿Ayuda para Prigozhin?
La reacción de Mikhail Khodorkovsky, miembro de la oposición rusa en el exilio, fue sumamente sorprendente. En las redes sociales llama a apoyar a Prigozhin: "¡Hay que ayudar hasta al diablo si decide rebelarse contra este régimen! Debemos ayudar, porque no hay peor crimen que hacer una guerra agresiva. Cuando un criminal está dispuesto a enfrentarse a otro, no es el momento de miramientos: debemos ayudarle ahora y después, si es necesario, lucharemos también contra él. Esto es solo el principio".
El factor decisivo para él fue el discurso de Prigozhin, en el que repetiría palabra por palabra los argumentos de los opositores a la guerra. La razón oficial de la guerra (la preparación de la OTAN para un ataque a Rusia) es una tontería que nadie se cree. El verdadero enemigo no está en Kiev, sino en Moscú. Y eso es lo que le dice a su audiencia el pretoriano más leal de Putin. ¡Quién lo iba a imaginar! "Lo que podemos hacer ahora para ayudar a nuestro país es ayudar a la gente a escuchar a Prigozhin siempre que diga la verdad (¡horror, qué estoy diciendo!)", continúa Khodorkovsky.
Acaparamiento de víveres en Rostov y fuego en Voronezh
Y se escuchan las declaraciones de Prigozhin. En toda Rusia. Y el pánico y el miedo se van extendiendo lentamente. Testigos presenciales informan de un incendio en un depósito de petróleo en Voronezh, también tomada por Wagner. Los lugareños publican fotos y videos que muestran una columna de humo. Aunque las fotos de movimientos de agentes armados y autos quemados se multiplican en redes sociales, es de destacar este emotivo video de una testigo que filma mientras llama a su madre.
En Rostov del Don, los medios locales informan de enfrentamientos entre residentes y mercenarios de Wagner. Según la agencia de noticias RIA Novosti hubo un tiroteo cerca del cuartel general. También se agregó un video al canal Telegram de RIA Novosti, que supuestamente muestra el altercado.
Los habitantes de Rostov entraron en pánico, los estantes de los supermercados se vaciaron rápidamente y hubo enormes colas en las estaciones de servicio. En este contexto, las autoridades impusieron restricciones a la venta al por menor de bienes de primera necesidad como cereales, harina, azúcar y otros.