Issa Al H., elpresunto atacante de Solingen, encaja perfectamente en el grupo objetivo más importante de la organización terrorista Estado Islámico (EI) y otros grupos extremistas como "Musulmanes Interactivos": varón, musulmán, joven. Los islamistas atrapan a estas personas en canales de redes sociales como TikTok o Telegram con el fin de ganar adeptos para su ideología, a menudo mortífera. El enemigo es cualquier forma de democracia en la que se garanticen las libertades políticas y sociales, y la igualdad de derechos entre hombres y mujeres.
Cualquiera que defienda esto y viva de esta manera, en cualquier parte del mundo, es considerado un infiel y, según la lógica del EI, puede ser asesinado. Según las conclusiones de las autoridades de seguridad y los expertos en terrorismo, los combatientes de la "guerra santa" son reclutados en Internet más que nunca: se trata de agresores individuales que, como en el ataque con cuchillo de Solingen, asesinan a personas utilizando los medios más sencillos.
El atacante de Solingen podría ser un "soldado" del EI
El EI reivindica la autoría del atentado. Aún no se ha aclarado de forma concluyente si Al H. actuó como "soldado" en nombre del grupo terrorista. Hay muchos indicios de que el solicitante de asilo sirio rechazado se radicalizó en Internet. En cualquier caso, encaja en el perfil de este tipo de atacantes.
Thomas Mücke, de la Red de Prevención de la Violencia (VPN) de Berlín, está familiarizado con este tipo de personas por su trabajo diario. Y sabe perfectamente qué papel desempeñan las redes sociales en la radicalización: hay toda una serie de películas propagandísticas para todos los grupos de edad posibles, con el fin de conseguir que los niños y los jóvenes se interesen por la causa. "Intentan apelar a las emociones de los jóvenes, crear un sentimiento de unidad", dice Mücke en entrevista con DW.
Videoclips con un mensaje sencillo: "¡Eres uno de los nuestros!"
Nada de esto es nuevo pero, según sus observaciones, se está intensificando. Se ofrece una identidad y se intenta alejar a los jóvenes de la sociedad con mensajes sencillos: "Eres uno de los nuestros si te comportas según las normas del verdadero Islam". Los videos hablan de un papel de víctima colectiva: "Los musulmanes están siendo perseguidos en todo el mundo, ¡tienen que defenderse!"
Según las observaciones de Mücke, este tipo de propaganda ha sido más eficaz que nunca desde el comienzo de la guerra de Gaza, tras el ataque terrorista contra Israel perpetrado por el grupo islamista Hamásel 7 de octubre de 20. "Estamos viendo muy claramente que la escena extremista utiliza el conflicto palestino como tema de movilización, instrumentalizándolo para promover su ideología política".
Las autoridades de seguridad exigen más competencias
La vigilancia es un elemento central de la detección temprana en la lucha contra el terrorismo, subraya Hans-Jakob Schindler, director del Proyecto Internacional de Lucha contra el Extremismo (CEP). Sin embargo, las autoridades de seguridad alemanas se quejan repetidamente de que tienen muy pocas competencias para ello. Creen que es esencial almacenar todos los datos de las comunicaciones electrónicas sin sospecha previa. Para ello sería necesario registrar todas y cada una de las direcciones IP (protocolo de Internet). Esto todavía no es posible porque el gobierno federal no se pone de acuerdo al respecto.
La ministra alemana del Interior, Nancy Faeser, del Partido Socialdemócrata (SPD), responsable de la policía y de la protección de la Constitución, está a favor de la demanda. En cambio, el ministro de Justicia, Marco Buschmann, de los liberales (FDP), considera suficiente el almacenamiento temporal de datos de sospechosos.
El servicio de inteligencia nacional y la policía no sabían nada
Los expertos discuten si el ataque con cuchillo de Solingen podría haberse evitado con la ayuda del almacenamiento de datos. Una cosa es cierta: el presunto atacante no estaba en el punto de mira ni de la policía ni del servicio de inteligencia nacional. Los resultados obtenidos hasta la fecha sugieren que Al H. se radicalizó en Internet.
Thomas Mücke, de la Red de Prevención de la Violencia, cree que es casi imposible impedir que este tipo de personas lleven a cabo sus planes asesinos: "Si no hay señales de alerta temprana, ni pistas, y la policía no tiene información, entonces, por supuesto, será muy difícil impedir algo así."