La antorcha de los Juegos Olímpicos de París comenzó este sábado su viaje hacia Francia a bordo del velero "Belem" que zarpó del puerto griego del Pireo, después de que la llama pasara la noche en la embajada francesa de Atenas.
A menos de cien días de la ceremonia de inauguración, el histórico velero francés de inició un viaje inédito, pues es la primera vez que la llama olímpica, que como cada cuatro años se enciendió en la antigua Olimpia, es trasladada por vía marítima desde Grecia a la nación anfitriona de los Juegos.
El velero del siglo XIX tiene previsto atracar el 8 de mayo en el puerto de Marsella, donde comenzará la travesía de la llama olímpica por varios puntos de Francia, incluidos sus territorios de ultramar, hasta la inauguración de los Juegos en París, el 26 de julio. El velero, el último de tres mástiles de la marina mercante de Francia y designado 'monumento histórico' en 1984, fue escoltado por el trirreme "Olympias" de la marina griega y por otros 25 navíos ante decenas de personas apostadas tras una barrera de seguridad en el puerto.
"Es un sentimiento excepcional. Es una gran emoción para mí", declaró a los periodistas Tony Estanguet, presidente -no exento de polémica- del Comité Organizador de los Juegos de París antes de que zarpara el navío. Estanguet destacó la gran "coincidencia" de que un velero como el "Belem", que forma parte del patrimonio histórico francés, fuera botado al mar por primera vez unas semanas después de que Atenas celebrara los primeros Juegos Olímpicos modernos en 1896.
"Vinimos aquí para que los niños entiendan que el ideal olímpico nació en Grecia. Me siento muy emocionado", dijo a la AFP Giorgos Kontopoulos, que presenció el inicio de la travesía del velero con sus dos hijos.