Novak Djokovic, que este domingo ganó el Abierto de EE.UU. y conquistó así su 'grand slam' número 24, aseguró que está viviendo un sueño que tenía desde que era un pequeño enamorado del tenis.
"No sé por dónde empezar. Obviamente, esto lo significa todo para mí. Creo que me repito, pero tengo que decir todo el tiempo que estoy de verdad viviendo mi sueño de niño", afirmó sobre la pista nada más derrotar en la final al ruso Daniil Medvedev.
El serbio, que igualó con 24 'grand slam' el legendario récord de Margaret Court, dio las gracias a su familia por apoyarlo desde que era pequeño en el mundo del tenis pese a que se trataba de un deporte muy caro y poco accesible, especialmente durante las guerras de los Balcanes en los años 90.
"Me enamoré del tenis. Nunca antes había jugado alguien en mi familia al tenis. Fue toda una decisión, tengo que decir. Pero tuve la increíble resiliencia y fe de mis padres y de todos los que me rodearon. Este trofeo es tanto de ustedes como mío, este también es su éxito. Los quiero", añadió.
Ya en rueda de prensa, Djokovic explicó cómo había afrontado las horas previas a la posibilidad de alcanzar un logro histórico.
"Hice todo lo que pude en las últimas 48 horas para no permitir que la importancia y del momento y lo que está en juego se metieran en mi cabeza, porque hace dos años eso es lo que pasó", dijo en referencia a la final del Abierto de EE.UU. que perdió en 2021 precisamente contra Medvedev.
"Así que aprendí mi lección. Mi equipo y mi familia sabían que en las últimas 24 horas era como: 'No me toques, no hables conmigo de la historia y lo que está en juego'", comentó.
Por último, Djokovic abordó la importancia de ganar este 'grand slam' tras haber perdido contra el español Carlos Alcaraz la final de la última edición de Wimbledon.
"Es genial para nuestro deporte que tenga una buena rivalidad con Alcaraz, sin duda. Es un gran revulsivo para el tenis, un increíble jugador y un gran tipo también"; afirmó.