Luego del duro traspié sufrido el jueves en su estreno en UEFA Conference League, el Betis de Manuel Pellegrini volverá a la acción en La Liga, donde afrontará una nueva edición del derbi andaluz frente a su archirrival Sevilla.
En la previa al encuentro que se disputará en el estadio Sánchez-Pizjuán, el "Ingeniero" dejó en claro que si bien hay un desgaste por la proximidad entre el choque con Legia de Varsovia y el pleito con los albirrojos, su equipo está en condiciones de afrontar la contienda sin mayores problemas.
"En cuanto a lo físico, venimos de un viaje importante, pero intentaremos estar lo mejor físicamente. Los partidos del jueves pasan factura con respecto al domingo, pero si no se gana mañana no se puede decir que fue por el jueves", aclaró el chileno, quien confirmó el regreso del argentino Giovani Lo Celso, quien se ha transformado en la gran figura de los verdiblancos.
Al respecto, el adiestrador bético apuntó que "ojalá que Giovani mantenga el rendimiento de partidos anteriores. No creo que un solo jugador pueda cambiar al equipo, pero veníamos con volumen ofensivo alto y el otro día en Europa no llegamos. Giovani está con contracturas musculares por los partidos seguidos. Lo fuimos dosificando, pero tuvo que jugar en el campo".
Por otra parte, el entrenador subrayó que para este encuentro "hay que rebajar la excitación para evitar fallos como en derbis pasados. La emoción y el ambiente te lleva a cometer errores que llevan a expulsiones. La clave es corazón caliente y cabeza fría, no cometer errores ni penaltis. Espero que tengamos la madurez para que lo que pasó en años anteriores no pase y concretar las ocasiones que tengamos".
Sobre su adversario, el estratego detalló que "en los derbis uno nunca sabe lo que se va a encontrar. El Sevilla intenta buscar un nuevo funcionamiento futbolístico. Tuvieron seis o siete entrenadores en los últimos años y no es fácil. Con (Francisco) García está intentando un nuevo modelo".
Por último, Pellegrini explicó que este compromiso "significa la alegría o la tristeza del aficionado. Son seis puntos para la hinchada, para los jugadores, para el equipo. El que lo gana sale fortalecido y el que lo pierde sale debilitado".