Cuando Iam Campbell, hijo de inmigrantes escoceses, nació en Valparaíso en 1928, se descubría la penicilina y se realizaban los Juegos Olímpicos de Ámsterdam. En Chile se vivía la dictadura de Carlos Ibáñez del Campo y el charlestón se consolidaba en la escena musical.
89 años han pasado y hoy, ad portas de las nueve décadas, el mejor rugbista chileno de todos los tiempos, aunque muchos no lo sepan, ven con entusiasmo el renacer de Los Cóndores.
En enero sellaron en el Seven de Viña su paso al Mundial de Estados Unidos, después de 17 años y fruto del trabajo de una generación joven, liderada por el capitán Felipe Brangier.
Así se reunió el esperanzador presente con el glorioso pasado para reconstruir la historia del rugby chileno.