Han pasado dos semanas desde que Chile recibió un segundo portazo de la FIFA luego de que rechazara la apelación por la denuncia contra Ecuador y Byron Castillo por supuesta suplantación de identidad del jugador, pero siguen surgiendo antecedentes.
Ahora se reveló que nuestro país intentó una estrategia de última hora para tratar de solventar su reclamo contra el futbolista.
Según dio a conocer El Mercurio, dos días antes de la audiencia final, la apelación liderada por el abogado Eduardo Carlezzo trató de incluir un testigo anónimo "que trabajó en la Federación Ecuatoriana de Fútbol".
Sin embargo, el ente rector del balompié mundial se lo negó por estar fuera del plazo correspondiente y porque Chile no pudo acreditar que el testigo estuviese con "integridad física en peligro" en caso de declarar, único motivo que establece el reglamento para aceptar esta solicitud.
Además, el Comité de Apelación recomendó a la FIFA abrir un expediente disciplinario contra Castillo por negarse a participar de la audiencia realizada.