Si bien su nombre estuvo en la órbita de Colo Colo para reforzar la portería con miras al exigente 2025 que tendrá el "Cacique", Claudio Bravo alzó la voz y mantiene su postura de jugador retirado. De manera paralela, mantiene una serie de proyectos fuera de las canchas con la misión de continuar con su veta empresarial junto a su esposa Carla Pardo.
Sumado a sus negocios inmobiliarios, su fundación y su complejo deportivo, el histórico capitán y bicampeón de la Copa América con la Roja incursionará en el rubro de la moda, lanzando una colección de anteojos bajo la marca Parrod. Eso no es todo: también tendría en mente estrenar su propio perfume en el corto plazo, además de incursionar en el diseño de ropa, carrera que estudia su hija Josefa en España.
"No me gusta verme mal en lo absoluto, y los anteojos son un buen complemento. Nos ha tocado movernos en un mundo donde te encuentras con un buen vestir, buenos lentes y quisimos acercar eso a Chile, insertarlo en las grandes tiendas y centros comerciales, para que la gente pueda comprar un producto de calidad a un precio razonable", indicó en diálogo con Revista Velvet.
En esa misma línea sostuvo que "en el deporte tenemos nuestra escuela de fútbol, de arqueros, gimnasio y ahora queremos replicarlo a mi fundación y llegar a todos los rincones del país para que los niños tengan la posibilidad de entrenar conmigo y vean de primera fuente cómo te preparas, sientes y vives la actividad. La idea no es formar futbolistas, sino buenas personas e inculcar valores".
"Otro desafío, además de los anteojos, es sacar una línea de perfumería y ya tenemos en mente un tercer proyecto relacionado a un producto que nunca debe faltar en una buena mesa… Estamos en conversaciones, viendo cómo lo elaboramos; será entretenido. Estoy con muchas cosas, ¡la cabeza me va a explotar!, pero contento; me siento pleno, soy un afortunado a nivel de salud, familiar, laboral", agregó.
¿Volverá al fútbol?
Al ser consultado sobre un posible retorno al fútbol para defender la portería de Colo Colo, Claudio Bravo aseguró que no ha extrañado la actividad en estos primeros meses alejados de las canchas.
"Lo que más echo de menos son las personas, las conversaciones con los utileros, con la gente que mantiene las canchas… A los 10 años me inicié en esto y siempre me tomé el fútbol como un tema laboral, en que dejé las emociones de lado, sólo me las guardaba para mi entorno", explicó.
Asimismo dijo que tomó la decisión de retirarse porque ya no sentía lo mismo al jugar al fútbol. "A nivel mental, emocional, comencé a sentirme plano; podía estar en una cancha con 100 mil personas y no sentía la misma adrenalina que en el comienzo. Perder un partido ya no me preocupaba y ganarlo tampoco era sinónimo de felicidad", señaló.
Respecto a los rumores sobre un posible retorno, Bravo fue enfático en señalar que "si fuera cierto, habrían existido conversaciones, alguna reunión con alguien de los clubes, pero no hubo absolutamente nada. Se especuló que podría haber terminado mi carrera en Chile, pero no fue posible porque jamás existió la formalidad de un contrato".
"Si llegaba a jugar en Chile iba a ser con un proyecto serio, que me llenara las expectativas; y no me refiero en lo económico. No buscaba aquí el mayor contrato de mi vida o ser el jugador mejor pagado de la liga chilena. Al contrario, me interesaba un proyecto ligado a las divisiones menores, en que pudiera aportar, enseñar, contribuir con mi experiencia que no es poca", recalcó.