El Campeonato Nacional de Primera B vivió un nuevo bochorno este domingo luego que el partido entre Santiago Wanderers y Universidad de Concepción, válido por la trigésima fecha del Campeonato de la Primera B, se suspendiera a menos de 30 minutos del horario programado.
Carabineros informó de manera protocolar que la decisión se remitió a "falta de garantías", pero todo apunta al conflicto de sueldos impagos que la dirigencia porteña mantiene con la empresa privada de seguridad que tiene contratada.
"Se nos ofrecieron dos cosas"
Este lunes, Jessica Frez, portavoz de la empresa de seguridad, dio su versión de lo ocurrido el pasado domingo, detallando cuál fue el ofrecimiento de Santiago Wanderers para lograr un acuerdo y así poder jugar el partido.
"Dos personas de apellido Sánchez, uno me llamó y el otro se presentó de manera presencial para tratar de llegar a un acuerdo absolutamente unilateral y de manera imperativa", comenzó manifestando en declaraciones que reproduce El Mercurio de Valparaíso.
"Se nos ofrecieron dos cosas. Una fue que nosotros podíamos estar dos años más a cargo de la seguridad privada dentro del club Santiago Wanderers si es que nosotros hacíamos ese servicio (el partido del domingo); y lo otro que se nos ofreció, y me van a disculpar porque es vergonzoso, fue una moto en parte de pago por el servicio", agregó.
Frez aseguró que no volverán a trabajar con la concesionaria de Wanderers, afirmando que nunca les han pagado desde que iniciaron la prestación de sus servicios.