"Toda nuestra vida se nos ha dicho que no tenemos futuro en el fútbol". Iona Rothfeld, mundialista con la Selección Chilena y presidenta de la Asociación de Jugadoras de Fútbol Femenino de Chile (ANJUFF), es severa respecto al difícil camino que deben enfrentar las cientos de mujeres que sueñan con jugar fútbol de manera profesional.
En conversación con 24 Horas Deportes, la ex seleccionada nacional afirmó que a pesar de los significativos avances en el fútbol femenino, la situación no ha cambiado tanto como se logra apreciar.
“Aún estamos muy lejos de tener una actividad que nos dé una estabilidad laboral como futbolistas. Los sueldos apenas alcanzan para el sueldo mínimo. Considerando eso, hay muchas jugadoras que no pueden dedicarse exclusivamente al fútbol”, sostuvo.
En ese sentido, la dirigente complementó que “nosotras llevamos y defendemos los colores de la misma forma que los hombres, pero siguen siendo tremendamente disparejas las condiciones porque si bien en un principio la excusa era que no existían recursos para la rama femenina, hoy vemos que no existe la voluntad ni las ganas de trabajar por parte de los clubes”.
Impresentables condiciones
El 6 de diciembre de 2023, la Dirección del Trabajo (DT) realizó un balance respecto a la Ley 21.436, la cual profesionaliza al fútbol femenino. Sin embargo, los resultados dieron cuenta que 35 de los 36 clubes fueron infraccionados por no cumplir con dicha ley.
Una cifra preocupante que se agrava aún más tras las revelaciones de Iona Rothfeld respecto a las condiciones de trabajo en las cuales entrenan gran parte de las futbolistas.
“Hay pocos clubes que trabajan de forma profesional. Aún hay equipos que presentan camarines que no tienen luz, agua caliente y con hongos. En otros casos no se les entrega indumentarias a las jugadoras o entrenan en canchas que no corresponden, y así un sinfín de cosas”, advirtió.
"No estamos solas"
Pese a aquello, Iona Rothfeld desea que estos impedimentos no sean motivos de frustración de centenares de sueños en territorio nacional.
“Siempre sigan soñando, los colores no distinguen géneros. No estamos solas y cuando eso pasa somos capaces de cambiar cualquier cosa. Ese es el mensaje que trató de dar siempre a las niñas y a las nuevas generaciones”, expresó.