San Lorenzo quedó eliminado de la Copa Libertadores tras caer en la revancha de octavos de final por 1-0 ante Atlético Mineiro (en la ida igualaron 1-1), que contó Eduardo Vargas en cancha.
Tras el pitazo final, en el "Ciclón" quedaron molestos no sólo con el resultado, sino también con el desempeño del árbitro chileno Felipe González. Quien no escondió su enojo fue el defensor Gastón Campi quien disparó con todo en contra del juez y su constante diálogo con Vargas.
"En el segundo tiempo estuvo todo el partido hablando con Vargas, capaz que van a comer juntos ahora. Es una vergüenza, la verdad es una vergüenza", dijo en diálogo con ESPN.
"Dijo que dio 10 minutos, no jugó ni 5 minutos. Un papelón. Estuvo parado después porque abrieron acá la manga esta para hacer tiempo. Un equipo que gasta 50 millones por año haciendo tiempo contra nosotros que nos venimos rompiendo el alma. La verdad estoy orgulloso de mis compañeros porque dejamos todo, tuvimos las más claras, ellos no jugaron a nada, no pudieron hacer una jugada y estoy re caliente con el árbitro pero me quedo tranquilo con lo que dejamos, nos merecíamos pasar", agregó.
"Fue un papelón, un papelón... El árbitro, un papelón jugando para ellos, el jugador número 12", acusó.