La investigación del exfiscal Manuel Guerra en el Caso Penta estuvo marcada por una serie de decisiones controvertidas, entre las que destaca la modificación de los cargos en 2018, hecho que generó cuestionamientos sobre la estrategia persecutoria y su impacto en la lucha contra la corrupción.
Concretamente, Guerra eliminó el delito de cohecho por el que estaban imputados los controladores de Penta Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín, y lo reemplazó por el de “enriquecimiento ilícito”.
Con la modificación de los tipos penales, se produjo un cambio significativo en la causa, ya que esta modificación, tuvo como consecuencia la salida del Consejo de Defensa del Estado (CDE) como querellante en el caso.
A siete años de los hechos y con el exfiscal Manuel Guerra en el ojo de la atención pública por sus vínculos con el abogado Luis Hermosilla; 24Data tuvo acceso exclusivo a correos entre el CDE, la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía Nacional y el entonces fiscal regional de la zona oriente. Todo lo anterior, pocos días antes de la reformalización de cargos en contra de los empresarios Carlos Délano y Carlos Eugenio Lavín en 2018.
Mediante correo electrónico institucional, con fecha 31 de mayo de 2018 a las 9:29 a.m., el investigador del Caso Penta Manuel Guerra notificó a la actual consejera del Consejo de Defensa del Estado acerca de las últimas actualizaciones en el proceso judicial.
Seis minutos después, el exfiscal también notificó a Marta Herrera Seguel, quien lideraba la Unidad de Anticorrupción de la Fiscalía Nacional, su justificación para eliminar o modificar los cargos que se le imputaban a Wagner, Lavín y Délano. Comunica que eliminó “los hechos relativos a actos propios del cargo por considerar que los mismos son irrelevantes penalmente”. Luego agrega que estos mismos hechos solo servían para abrir discusiones sobre cohecho “que estimo no existe y estratégicamente solo sirve para jugar en contra de los intereses del MP (Ministerio Público)”
La respuesta a ese mail tardó cinco días, en el cual la Unidad Anticorrupción entregó tres hojas de argumentos jurídicos al exfiscal Guerra, “recomendando” que “debiera mantenerse los hechos de la manera en que fueron imputados originalmente”.
Incluso, se ponen en evidencia cinco puntos que Guerra modificó o eliminó:
- Se eliminó el contenido de un correo electrónico de 10 de marzo de 2010, dirigido por Wagner a uno de los controladores del grupo Penta, Carlos Eugenio Lavin, en el que solicitaba "ayuda" para que se le pagarán $92 millones de pesos que supuestamente le adeudaron, lo que no era efectivo.
- Cada vez que el relato se refería a un "beneficio económico", se cambia a "aporte económico".
- Se elimina la referencia a "pagos del soborno" y se cambia por "aporte económico".
- Se eliminan referencias a que los pagos realizados por el entonces Gerente General del grupo Penta, eran en cumplimiento a instrucciones de los controladores Carlos Délano y Carlos Lavín.
- Se eliminan todos los párrafos que detallan las actuaciones realizadas por WAGNER vinculadas a negocios de los controladores de Penta.
Además, hay que destacar que en dicha comunicación formal, antes de la reformalización, la Unidad Anticorrupción ya advertía que con los datos aportados existían hechos constitutivos de delitos y recomendaba que , “sería preferible fueran resueltas por el órgano jurisdiccional y no por la fiscalía”.
Además, destaca que con este cambio de tipificación del delito, el Consejo de Defensa del Estado, queda fuera de la causa, a lo que la Fiscalía Nacional recomendó “compatibilizar con la naturaleza subsidiaria del delito de enriquecimiento ilícito, presenta como ventaja secundaria permitir al Consejo de Defensa del Estado sostener su acción penal por el delito de cohecho, velando de alguna forma por nuestra coordinación con un querellante bastante relevante para nosotros.”
En contra de lo aconsejado por la Unidad Anticorrupción, el exfiscal procedió a reclasificar el delito, una decisión que tuvo como consecuencia directa la retirada del Consejo de Defensa del Estado del caso Penta.
La relación entre Hermosilla, Guerra y la reformalización en el Caso Penta
En el contexto del llamado “caso audios” se dieron a conocer varias conversaciones vía Whatsapp que mantuvo el abogado Luis Hermosilla - actualmente imputado por delitos tributarios, soborno y lavado de activos- con distintas personalidades del mundo político y jurídico del país. Entre ellos está el exfiscal Manuel Guerra, quien justamente tuvo comunicación vía chat con Hermosilla sobre el Caso Penta.
Así lo revela la querella por cohecho agravado, violación de secreto y prevaricación administrativa en contra de Manuel Guerra, y por soborno y cualquier otro que se le impute contra Luis Hermosilla; presentada el pasado 7 de octubre por la ex directora del CDE, María Inés Horvitz y el abogado Mauricio Daza. Estos últimos, querellantes del Caso Penta en 2018 y que en ese entonces acusaron de una “práctica ilegal” al Ministerio Público al eliminar hechos que habían sido parte de la formalización previa y que permitieron la reformalización de Lavín y Délano.
La querella interpuesta ante el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, en el marco de la investigación dirigida por el Fiscal Regional de Arica y Parinacota, Mario Carrera Guerrero, expone cómo el exfiscal Manuel Guerra proporcionaba información confidencial sobre la causa al abogado penalista.
“Las graves irregularidades ejecutadas por Guerra en esta audiencia en beneficio de los imputados resultaban tan evidentes y abusivas, que nos llevaron a concluir que la hipótesis más consistente para explicarlas era que hubo algún tipo de acuerdo ilícito de por medio, incluyendo algún beneficio indebido. Esta hipótesis se puede ratificar hoy a partir de los antecedentes que han sido revelados durante el transcurso de este año. En efecto, la verdadera razón de la actuación de Guerra en esa audiencia se encontraría en los acuerdos informales alcanzados con Hermosilla y con Andrés Chadwick de “darle una salida a este caso” y a otros vinculados con personeros de la UDI, a cambio de futuros favores”, dice parte de la querella.
El documento muestra los chats entre Hermosilla y Guerra al respecto:
“Guerra: Lucho le escribí a Andrés ya que me preocupa los escasos avances destinados a ir terminando las situaciones relativas a gente de la UDI en Penta así como lo relativo a Stgo Valdes (-exadministrador electoral de la campaña presidencial de Piñera en 2009 y exejecutivo de sus empresas, también estaba en la mira por un contrato forward presuntamente fraudulento, por haber facilitado facturas falsas por $340 millones a SQM, y otras por $58 millones a Aguas Andinas y a Pampa Calichera, una de las empresas que forman parte de la cascada con que Julio Ponce Lerou controló durante décadas SQM).”
Y luego:
“Guerra: En el fondo saber cual es la postura en que están a fin de poder tomar decisiones de fondo.
Hermosilla: Te agradezco Manuel.
Hermosilla: Me preocuparé de inmediato.
Hermosilla: Son unos pelotudos.
Hermosilla: Te avisaré.
Guerra: Gracias Lucho.”
El 27 de julio de 2017 Guerra escribe a Hermosilla sobre las declaraciones que tomó a los controladores de Penta, Carlos Délano y Carlos Lavín:
“Hermosilla: Jajajaja. Se deben haber esmerado…
Guerra: No me cabe duda.
Guerra: Délano más extrovertido. Lavín más parco.
Hermosilla: Así son.
Hermosilla: Cómo va eso? Algún avance?
Guerra: No tenemos conversaciones vigentes con su defensa aunque claramente Julián quiere (se refiere a Julián López, el abogado que representó a Délano y a Lavín en el Caso Penta).”
“El 20 de mayo de 2018, a menos de dos meses de la audiencia de formalización en la causa Penta, Guerra le anuncia por primera vez a Hermosilla que no está cómodo en el Ministerio Público. Mientras avanza el tiempo, los mensajes se harán más explícitos y terminará derechamente pidiéndole trabajo. Guerra liga sus posibilidades laborales futuras con las decisiones que estaba adoptando en la investigación sobre Penta:
Guerra: En fin. Yo quiero salirme luego de esto porque el estado es de desesperanza.
Guerra: En la fiscalía cero respaldo y afuera ni hablar. Por tratar de ser serio soy objeto de las ofensas del FA (Frente Amplio) y sus catones morales y de la absoluta indiferencia de la derecha.
Hermosilla: Compañero, lo único que vale la pena es la familia (más cercana), los recuerdos, las minas, los pocos amigos y pare de contar. En lo histórico-social, ya les toca a otros. Viajar hace bien y, por cierto, la buena lectura. En lo demás, estamos cagados.
Guerra: Linda vista. Yo tengo que ver qué hacer porque estoy podrido en el MP. Y tengo un cabro chico al que educar.
Hermosilla: Tenemos hartos temas pendientes.
Guerra: Si. Nosotros estamos viendo que hacemos ya que entre la causa de Piñera y la de Penta yo rompí o creo que se rompieron casi todas las redes que tenía en el mundo que ahora es oposición. Más aún si se consolida el acuerdo en Penta probablemente me caiga su acusación por parte del FA más otros parlamentarios opositores. Y en el mundo de la derecha yo soy como chino crespo y colorín. Así que empezaré a ver cómo buscar pega porque aguantar en el MP se ve difícil. Ya sea por el aburrimiento que generan estos temas complejos o porque me pegan la patada en el culo.
Guerra: El MP está en una crisis grave con un FN débil pero que aguantará el periodo en cual además conmigo está cruzado y no confía en mí.
Guerra: Y por otra parte no puedo aspirar a nada en el mundo público porque llevé un caso que involucró directamente al Pdte.
Guerra: De hecho me tomé el martes para desconectarme un poco más pero ya pienso en el miércoles y me aburro. Entraré en una pelea muy dura con el CDE por Penta en la cual la FN me dejará pelear solo.”
El Ministerio Público continúa profundizando en la investigación de la arista relacionada con Guerra en el caso de los "audios". Esta semana se llevarán a cabo nuevas diligencias investigativas a cargo del fiscal Carrera.