Una de las interrogantes que ha surgido en estos últimos días por las medidas que se han tomado para frenar el contagio de coronavirus es qué precauciones se debe tener con las mascotas durante el periodo de aislamiento o cuarentena.
Rodrigo Santana, académico de Medicina Veterinaria de Universidad de Las Américas, sede Viña del Mar, entrega algunos consejos sobre salud, alimentación y actividad física para poner en práctica con animales de compañía frente a esta emergencia sanitaria en nuestro país.
El médico veterinario explica que si bien la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha aclarado que hasta la fecha no hay evidencia de que un perro, un gato o cualquier mascota pueda adquirir COVID-19 y contagiarlo a un humano, es decir, no constituye una zoonosis, pero igualmente es importante aplicar algunas medidas en el hogar.
“Si una persona está confirmada como positivo, debe efectuar rigurosamente el periodo de aislamiento y el cuidado de la mascota debe asumirlo otro integrante de la familia que no presente síntomas o un cuidador temporal, el que debe seguir las mismas medidas de higiene recomendadas por las autoridades sanitarias, estricto lavado de manos, procurar la permanente desinfección con cloro de los utensilios que ocupa la mascota, como platos, contenedores de agua, collares, juguetes”, comenta el médico veterinario, quien recalca que un animal de compañía debe tener el más mínimo contacto con una persona contagiada, no dormir con ella y permanecer igualmente en un periodo de cuarentena, pues pese a que no se infecta de COVID-19, igual puede actuar como vector de partículas del virus que queden en su cuerpo o en sus utensilios. Esta condición de “fomite” no es solo de la mascota sino también de todos los integrantes del grupo familiar, por lo tanto, las medidas sanitarias son iguales para todos.
Si una familia está en cuarentena o ha optado por aislamiento preventivo, idealmente no se recomienda sacar a pasear a perros a la calle y se debe cambiar esta actividad por otras en casa, en pasillos o patios protegidos, por ejemplo, juegos y ejercicios de destreza, donde es importante que haya una interacción con la persona que esté a su cuidado. En el caso de sacarlos a pasear, no extender las salidas más allá de media hora y respetando los horarios de toque de queda. En aquellas comunas con cuarentena, el paseo debe ser no más de dos cuadras a la redonda de su domicilio siempre con precaución y recogiendo sus deposiciones.
Respecto de la alimentación e hidratación de las mascotas, Santana dice que esta debe continuar de manera habitual, reforzando las medidas de higiene de platos y contenedores. Siempre deben tener a disposición abundante agua fresca y en el caso de la comida, dentro de lo posible, se debe continuar con la que habitualmente come para evitar problemas gastrointestinales, optando por comprar a través de plataformas online con reparto a domicilio, para evitar salir de casa. En el caso que este alimento no llegase a estar disponible, se puede optar de manera provisoria por darles alimentos preparados en casa como por ejemplo arroz y pollo cocidos solo en agua, sin aliños y de manera temporal mientras se consigue el alimento habitual.
Sobre las visitas al médico veterinario y controles de salud de las mascotas, el académico dice que en este tiempo hay que priorizar las que son estrictamente necesarias como, por ejemplo, urgencias médicas y la inoculación de vacunas, pues esta última es la mejor prevención frente a varias enfermedades infeccionas, dejando para más adelante cirugías que no son perentorias y visitas a la peluquería canina.
¿En qué casos se debe acudir si o si al médico veterinario? Urgencias:
- Pacientes con vómitos y/o diarrea sobre todo si son menores de un año y sin vacunas al día.
- Pacientes politraumatizados, convulsivos, contusos y por traumas como atropellos, golpes y caídas.
- Pacientes con eliminación de fluidos biológicos (sangre, pus) por vías naturales como cavidad oral, nasal, genital o digestiva.