"Ya se ha respondido esa pregunta en reiteradas ocasiones". Esta fue la respuesta que dio en enero el Presidente Gabriel Boric, ante los reiterados cuestionamientos hacia su persona por indultar a 13 personas, entre ellas, el recientemente detenido Luis Castillo.
La respuesta del Mandatario hacía referencia a las declaraciones realizadas unos días antes por el ministro de Justicia, Luis Cordero, quien aseguró que no había "ningún antecedente que dé cuenta que el Presidente hubiese indultado a personas equivocadas".
Sin embargo, aquel escenario cambió radicalmente este jueves, ya que Luis Castillo Opazo, de 36 años, fue detenido en Copiapó por presuntamente haber participado en el secuestro de un hombre.
De acuerdo con los antecedentes recabados por TVN Red Atacama, cuatro personas fueron capturadas por Carabineros al interior de un vehículo que estaba en un servicentro de la ciudad tras percatarse de que en el maletero había una persona.
"Nos hemos constituidos para investigar un presunto secuestro que habría ocurrido anoche en una estación de servicio y cuya víctima habría sido rescatada por Carabineros el día de hoy, en otra estación de servicio en calles Avenida Copayapu con Luis Flores", sostuvo el fiscal Cristián González.
El persecutor aclaró que "hay cuatro detenidos y una víctima" por este caso y que los presuntos involucrados podrían pasar a control de detención mañana viernes. Además, precisó que el vehículo en que transitaban los invididuos sería de la propia persona secuestrada y que el afectado estaría en buenas condicioned de salud con "lesiones de carácter leve".
La controversia por los indultos
El 30 de diciembre de 2022, el Ministerio de Justicia, en ese entonces liderado por Marcela Ríos, entregó una nómina con 11 indultados. Luego de cuatro horas, el Gobierno rectificó el listado y finalmente fueron 13 los beneficiados.
"En el primer comunicado que se emitió hubo dos que no se por qué no se incluyeron en el listado", dijo Boric en aquel entonces.
Días más tarde, se supo que el error se debía a que la propia subsecretaría de Derechos Humanos había considerado no indultar a dos individuos. Uno de ellos era Luis Castillo Opazo por sus antecedentes penales previos.
Esto generó críticas desde la oposición, pues varios parlamentarios mencionaron que liberar a estas 13 personas era una "mala señal". Ante los cuestionamientos, Boric respondió que la decisión de indultar "era difícil", pero que lo hacía "pensando en el bien de la patria. Estos son jóvenes que no son delincuentes".
No obstante, la controversia no terminó ahí, ya que días más tarde se dio a conocer un informe de Gendarmería, el cual tildaba de "desfavorable" indultar a Castillo. Pero, al ser una decisión presidencial, el Mandatario autorizó el indulto pese a la advertencia de la institución.
Dicha acción generó la salida de la ministra de Justicia, Marcela Ríos, ya que posteriormente se comprobó que el Gobierno pidió mantener en reserva los expedientes de los indultados, donde aparecen los informes de Gendarmería.
Es importante destacar que Castillo estuvo involucrado en ataques a servicios públicos e incluso un saqueo a una automotora, en el contexto del estallido social en Copiapó, y que para esa fecha ya tenía antecedentes y condenas por otros cinco delitos.