El expresidente Sebastián Piñera abordó este lunes la situación del Gobierno del Presidente Gabriel Boric y el tenso pulso que mantiene que la UDI por la permanencia de Giorgio Jackson, ministro que el gremialismo pide destituir para volver a discutir la reforma de pensiones.
En el Congreso en Santiago, tras exponer en la Comisión de Sistema Político del Consejo Constitucional, Piñera manifestó que "con el tema del ministro Jackson, yo fui presidente, es muy difícil nombrar y más difícil destituir a los ministros, pero un presidente siempre tiene que pensar en el interés común, el de Chile, el de todos los chilenos y no incorporar consideraciones personales".
Respecto a la trabada negociación por una reforma previcional, expuso: "Yo creo que Chile, los chilenos, los pensionados y los futuros pensionados necesitamos acuerdo en materia de reforma previsional. Acuerdo que, en mi opinión, debe respetar la libertad de elección, porque esos recursos les pertenecen a los trabajadores y ellos tienen que decidir, y el Estado no tiene derecho a pretender tener un monopolio, sino que tiene que respetar la decisión de cada trabajador".
El exjefe de Estado aseveró que "es muy importante que esta reforma asegure y garantice la propiedad de los ahorros provisionales, que pertenecen a los trabajadores. En consecuencia, proteger que no puedan ser manipulados o expropiados. Esos son los objetivos y yo creo que en eso coinciden todos los partidos políticos, incluyendo la UDI, y ahora falta que tengamos ese diálogo fecundo para llegar a ese acuerdo".
En la instancia, Piñera abordó el llamado que hizo el Presidente Boric a los partidos políticos para firmar una declaración conjunta que condene el Golpe de Estado, a propósito de la conmemoración por los 50 años.
"Tanto el Gobierno de la Unidad Popular como el Golpe militar dividieron profundamente a los chilenos y eso ocurrió hace 50 años (...) yo creo muy conveniente y necesario promover un clima de unidad, de entendimiento, de amistad cívica, de buena voluntad y creo que ese tipo de llamados hay que hacerlos con diálogo y no desde el extranjero", acotó.