Alrededor de 70 militantes de la Democracia Cristiana se retiraron de la Junta Nacional del partido que se ha desarrollado de forma telemática, acusando "graves irregularidades" en una misiva difundida esta tarde.
Además, anunciaron que se reservan el derecho a acudir a tribunales de justicia para impugnar "situaciones de manifiesta ilegalidad" que comprometieron el actuar del partido y se declararon en estado de reflexión sobre su militancia.
Entre quienes firman se encuentran los diputados Joanna Pérez y Jorge Saffirio, además del ex presidente Fuad Chahín, el ex secretario general David Morales y el ex candidato a alcalde de Las Condes, Nicolás Preuss.
A través de una carta, los militantes remarcaron la situación con el Tribunal Supremo del partido, cuyo mandato fue declarado como "vencido" por el Servel este viernes y que "no sólo ha acordado resoluciones graves como la suspensión de la militancia del ex Presidente del Partido Fuad Chahín, sino que las que permiten la realización de esta Junta Nacional (...) como la calificación de las candidaturas tanto al Consejo Nacional como al propio Tribunal Supremo".
Esto, "habida consideración que cuatro miembros son candidatos a la reelección y en mencionada calificación han dejado a cinco candidaturas inhabilitadas, es decir, son juez y parte en mencionado proceso".
También enfatizaron que han planteado como fórmula para salir de la crisis el convocar una Junta Nacional presencial en un plazo no menor a 15 días, "instancia donde se elijan el Tribunal Supremo y el Consejo Nacional, apoyando la designación del Camarada Alberto Undurraga como Presidente Nacional del Partido, a pesar de haber sido parte de un acuerdo en el que no hemos participado". Sin embargo, reclaman que eso no fue aceptado y "se insiste en profundizar la división siguiendo adelante con las votaciones como si los órganos fiscalizadores nada hubiesen dicho".
Por estos motivos, los militantes señalaron que decidieron "no participar de las votaciones y debates de la Junta Nacional, nos reservamos el derecho de acudir a los Tribunales Ordinarios de Justicia para impugnar todas las situaciones de manifiesta ilegalidad que comprometen gravemente el actuar de un partido político, los que hoy son fiscalizados estrictamente por la legislación vigente". Y finalmente concluyen diciendo que "con profundo pesar nos declaramos en estado de reflexión respecto a nuestra militancia".
Además, en una declaración paralela, el diputado Miguel Ángel Calisto afirmó que "participar de una Junta Nacional en estas condiciones, es validar una situación irregular dentro de la Democracia Cristiana. Me parece que se están tomando decisiones absolutamente estalinistas, en medio de una crisis de las más grandes de nuestra historia".
"La opción que ha determinado la Directiva Nacional es el control, y yo no estoy disponible para eso. Me declaro en estado de reflexión, no me siento parte de una comunidad donde las acciones no son democráticas", concluyó.