El Tribunal Supremo de la Democracia Cristiana suspendió la militancia de Fuad Chahín tras prestar su apoyo a la opción del Rechazo en el último plebiscito. Ante esto, el exdiputado, en conversación con Canal 24 Horas aseguró que a quienes piensan distinto "no se le puede perseguir, suspender o expulsar".
Fuad Chahín, expresidente de la Democracia Cristiana, lanzó duras críticas a la forma en que según señaló "el partido forzó una Junta Nacional sin debate político, sin analizar la propuesta constitucional a una opción que fue ampliamente derrotada por la ciudadanía", en relación al plebiscito de salida.
Agregó que tras el triunfo del Rechazo"los perseguidos, suspendidos y, los que tiene que buscar otro espacio para hacer política, son los que logramos sintonizar con la gente".
Mencionó que esperaba "un poco de autocrítica" y "entender que el partido está absolutamente desorientado, que han utilizado el Tribunal Supremo como una forma de tener una verdadera policía política".
"Una docena de militantes pidió mi suspensión, todos cercanos a la directiva (...) así presentaron la solicitud un día feriado y, el Tribunal Supremo, en una sesión especial me suspendió la militancia", explicó.
Detalló que lo anterior ocurrió "cuando todos sabían que este jueves me iba a inscribir como candidato al Consejo Nacional del Partido. Y lo dicen en su carta para que no participe de la junta, le pregunto a Aldo Mardones, ¿por qué tienen miedo a que pueda ir yo a la junta? (...) a debatir ideas y el rol de la DC".
Asimismo, aseguró que la suspención de su militancia fue "una resolución exprés del Tribunal Supremo (...) me suspende la militancia en menos de 24 horas de que se venza el plazo para inscribir las candidaturas al Consejo Nacional para excluirme de este proceso".
Al ser consultado del por qué los militantes que presentaron el recurso también hacían alusión al maltrato, Chahín preguntó: "¿Ellos tiene derecho a presentar una querella en mi contra sin fundamento? utilizando un mandato del presidente del partido sin su consentimiento (...) y eso ¿no es maltrato?".
Bajo la misma línea agregó se debería asumir que "se cometió un error por parte de la institucionalidad a forzar el partido a una posición errada y quienes estuvimos por el Rechazo estuvimos en una posición correcta".
"Yo los critiqué y me suspendieron la militancia. ¿qué partido democrático es? no es ni demócrata, ni cristiano. El que piensa distinto tiene todo el derecho a opinar, no se le puede perseguir, suspender o expulsar", concluyó.