La Corte de Apelaciones acogió la solicitud de desafuero de la diputada Catalina Pérez, en el marco de las acusaciones de corrupción, concretamente tres fraudes al Fisco, en el denominado Caso Democracia Viva, arista que dio origen al Caso Convenios.
La solicitud fue acogida de manera unánime por parte del tribunal y la sentencia quedó fijada para el día 20 de febrero próximo.
De esta manera, la Fiscalía quedó en condiciones de poder de formalizar a la parlamentaria, no obstante, Pérez podrá apelar a esta resolusión ante la Corte Suprema dentro de un plazo de 5 días una vez conocida la sentencia.
Previo a la audiencia, el abogado defensor de la congresista, Gonzalo Medina, expuso que la instancia fue una "oportunidad para demostrar su total inocencia".
Asimismo, aseguró que "no hay antecedentes de hecho que den cuenta de su participación en un eventual delito de fraude al Fisco".
Por su parte, el abogado querellante, Pablo Toloza, afirmó que el trabajo "ha sido serio para demostrar que hay antecedentes claros de la participación de la diputada en distintas etapas del proceso, tanto antes, durante y después de la fundación de Democracia Viva".
"La ciudadanía conoce los chats. Es especial que la propia diputada, quien en 2018 presentó un proyecto para eliminar el fuero en casos de corrupción, ahora se aferre a él", consignó.
Los chats que complicaron a Catalina Pérez
En el marco de la investigación, se dieron a conocer algunos chats que Pérez le había enviado a su entonces pareja, Daniel Andrade. Entre los mensajes, destaca uno donde ella le decía que "ambientara" las dependencias de Democracia Viva para que se vieran operativas.
“Es más importante ir al centro a sacar los stickers, llevar papeles para que parezca un lugar de trabajo, esas cosas. Es obvia la nota con la cámara prendida donde van y dicen: ‘Miren, aquí supuestamente trabaja la fundación. A ver, vamos a golpear... ¡Hola! ¿Aquí funciona Democracia Viva?’ Sale una persona y dice: ‘¡Nooo, jamás lo he escuchado!’ y cagamos”, escribió.
Pese a estos mensajes, la diputada había defendido su inocencia, asegurando que "nunca intervine de ninguna manera en la suscripción de convenios, no hice nada para que estos convenios se concretaran no recibí ni un peso de aquellos y no conocía de los detalles financieros u operacionales de ellos".
"Se han filtrado mensajes horribles, muy posteriores a la firma de los convenios una vez que esto ya era públicamente conocido, para buscar ayudarlo y enfrentar lo que era en ese entonces para mí una crisis comunicacional. Me equivoqué", aseguró.