La Pontificia Universidad Católica presentó una querella en el 13° Tribunal de Garantía de Santiago por un doctor en ciencias que roció con ácido equipos de investigación avaluados en 280 mil pesos.
El docente sospechoso fue desvinculado de la casa de estudios en pasado julio, y, según consignó LUN, era quien lideraba las investigaciones del laboratorio con los computadores que atacó.
Su seguimiento fue captado por las cámaras de seguridad del Campus San Joaquín y se aprecia cómo el profesor vestido de chaqueta azul con diseño camuflaje, jeans azules y gafas oscuras ingresó a uno de los laboratorios del edificio.
Fue ahí cuando, con una jeringa que ya llevaba consigo, la llenó con ácido desde un recipiente y lo vertió sobre una máquina de "equipo para grabado reactivo iónico" que fue adquirida gracias a un concurso de fondos. El líquido dejó al aparato "completamente inhabilitado para operar", según los investigadores.
Desde la UC, afirmaron que se trató de un "acto vandálico" y que "los equipos que sufrieron daños fueron dos. Uno sufrió el robo de una de sus piezas claves para operar que corresponde a un sistema de litografía óptica que permite diseñar circuitos integrados".
"El otro equipo es un sistema de grabado utilizado también en micro y nano fabricación de dispositivos. Este último fue el que sufrió más daños severos, pues se le desconectaron los claves en su interior, lo que afecta la electrónica y la comunicación con el computador desde donde se comandan los procesos", detalló la casa de estudios.
"Esta acción compromete el desarrollo de investigaciones en curso y otras que se estaban iniciando en el Instituto de Física UC. Todo esto se ha viso truncado por causa este acto vandálico", agregó UC.
¿Quién es el profesor que atacó los computadores?
Se trata de Laïk Gence, un investigador belga con un doctorado en ciencias de la Universidad Católica de Lovaina. Pertenecía a la institución desde el 2016 y se desempeñaba como profesor asistente en el Instituto de Física de la UC.
El 16 de julio fue despedido de la casa de estudios y, causó sorpresa, al ser el principal impulsor de la creación del espacio Sala Limpia, uno de los más sofisticados de la física experimental en el país.