Los niños y niñas de un colegio tuvieron que tirarse al suelo por el protocolo antibalaceras, debido a un doble robo de vehículo registrado en Macul.
Delincuentes a plena luz del día realizaron dos encerronas al mismo tiempo, alrededor de las tres de la tarde, en la rotonda Quilín de Macul.
Los sujetos amenazaron a las víctimas de cada auto con armas de fuego, y hasta dispararon al aire.
Según los datos de Carabineros, en el cuadrante 190, esta encerrona sería el caso 83 de este año en la categoría de "robo violento de vehículos". Además, en comparación con el año pasado, en esta misma fecha se registraban 58.
Las encerronas ocurrieron a solo unos metros de la escuela Nuestra Señora del Pilar, donde asisten niños de educación básica y se vieron gravemente afectados por la delincuencia.
A raíz de la recurrencia delictual, el colegio mantiene un protocolo de protección que lideran los profesores, asistentes de la educación y todos los miembros de la comunidad.
"El protocolo en este caso es que los niños se van al piso, se protegen, se alejan de las ventanas. Es una situación delictual que de alguna manera los pone en riesgo", señaló el director del colegio Nuestra Señora del Pilar, Sergio Pastene.
Debido a las incidencias delictuales, el colegio mantiene dicho protocolo para proteger a los estudiantes de la escuela, teniendo que suspender sus clases habituales por los antisociales.
Por ahora, la Policía de Investigaciones (PDI) sigue con las indagatorias para encontrar a los responsables y así evitar que colegios sean víctimas de esta red delictual.