El gobernador de la región Metropolitana, Claudio Orrego, anunció una querella criminal en contra de las personas detenidas por rayar y vandalizar el frontis de la Iglesia San Francisco de Santiago, estando entre ellos Roberto Campos, sujeto conocido como el "profesor del torniquete" que fue capturado en el marco del estallido social por destrozos en el Metro de Santiago.
Según dijo la autoridad, "el estado de nuestra principal avenida está fea, sucia e insegura. Hemos hecho un proyecto emblemático de colaboración para cambiarle la cara al eje Santiago - Providencia, sobre todo pintar y recuperar los territorios históricos".
"Lo que vimos ayer llama a la indignación. Es tercera vez en tres semanas que un grupo de personas se abogan el derecho de destruir y dañar un monumento histórico que les pertenece a todos independiente de su credo religioso", añadió.
Asimismo, resmarcó que "se acabó el tiempo de impunidad, esta idea de que la gente puede destruir todo con pretexto de algún derecho de expresión. La libertad de expresión encuentra un límite con el derecho de los demás con una ciudad limpia".
Orrego subrayó la existencia entre los detenidos de Campos, "conocido como el 'profesor del torniquete', quien ya había tenido antecedentes de destruir inmobiliario público".
"A además se le pilló no solo dañando un monumento histórico, sino que también escribiendo un mensaje de odio llamando a matar carabineros. Esas dos acciones son inaceptables", afirmó.
Igualmente, manifestó que "el que raya un monumento es un delincuente, llegó el momento en que la ciudadanía se levante y rechace estas prácticas que se han normalziado".
Para finalizar, Orrego criticó las pocas penas que existen para este tipo de delitos, pidiendo a los tribunales "mayores castigos".
"Lamentablemente, la legislación chilena es laxa. En Perú, uno destruye un monumento y se va a la cárcel. Hacemos un llamado a jueces a ser extremadamente duros con este caso", sentenció.