Este miércoles los dos imputados en el homicidio frustrado de Pola Álvarez, enfermera atacada al salir de su trabajo el pasado domingo en la comuna de Las Condes, recibieron la medida cautelar de prisión preventiva por el 4° Juzgado de Garantía de Santiago. En este marco, la Fiscalía entregó detalles inéditos respecto a la investigación del caso.
Fue el fiscal Francisco Lanas el que primero entregó detalles en la audiencia de formalización, detallando que el ataque fue realizado con un "un cuchilo en lugares que, por sí mismo, podrían causar la muerte" de una persona, sin embargo, especificó que la oportuna asistencia médica fue clave en la sobrevivencia de la víctima.
Junto con confirmar que se trató de 11 lesiones en distintas partes del cuerpo, hubo una de ellas que "estuvo muy cerca del corazón", lo que demostraría que el ataque tenía la intención de dar muerte a la enfermera. Además, varias de esas heridas, están presentes en el cuello y cara.
La moto
Las indagatorias sobre la motocicleta usada por el sujeto para llegar hasta Las Condes para cometer el crimen, también han sido clave en reunir las primeras piezas del hecho.
"Se hacen las averiguaciones sobre la moto (...) y se llega a que la imputada mantiene inscrita a su nombre una moto Intruder con la placa patente que se acaba de señalar", detalló el fiscal.
Ante esta pista, se socilitó la revisión de diversas cámaras de seguridad tanto en Puente Alto como en Las Condes para determinar el trayecto del atacante.
Una cuesitón clave en el caso es el hallazgo de pegatinas en la casa del imputado que tenían el objetivo de cambiar el color de la moto: de negro a blanco.
El seguimiento de las cámaras, según detalla el fiscal, habría permitido establecer el momento en que se realiza el cambio en el color del medio de transporte.
"A través del levantamiento de cámaras se logra establecer que la moto Intruder ... (es captada) a cinco cuadras de el domicilio que tenía registrados ambos imputados", de un color, pero luego, con la misma patente, es capatada con un color diferente en Las Condes previo al ataque.
Antecedentes de la relación de la víctima y Patricia Henríquez
"Problemas de carácter laboral, de acoso laboral y están respaldados en la carpeta investigativa (...) la imputada había hecho reclamos en contra de la víctima", son parte de los elementos que puso en conocimiento el Ministerio Público ante el tribunal.
En los días previos al ataque del pasado domingo 26 de junio, según pudo verificar el fiscal, Patricia Henríquez, la imputada, enviaba un video a su pareja e imputado.
En las imágenes que fueron compartidas con Hanson el 23 de junio "se aprecia a la víctima, a Pola, fue encontrado en el celular del imputado".
Junto al video se leen varios mensajes enviados entre ellos:
Enrique Hanson: "Me dedicaron la canción"
Enrique Hanson: "De 'Te felicito qué bien actúas'"
Patricia Henríquez: "La weona de la pola es esa"
Patricia Henríquez: "La rucia"
Patricia Henríquez: "Qué lástima"
Enrique Hanson: "Sí"
Patricia Henríquez: "Ya crea en dios"
A esto se suma comunicaciones que tuvieron ambos imputados, posterior al ataque, alrededor de una hora y media después de ocurrido el hecho.
"Con esos elementos (...) estimamos que existen presunciones fundadas de participación" en el homicidio frustrado, determinó el Ministerio Público.
La mirada al celular
Finalmente, en la presentación de la Fiscalía también expuso la fiscal Patricia Ibarra, la que detalló que la propia víctima alcanzó a entregar su testimonio de lo que ocurrió previo al ataque.
De acuerdo al relato de Pola: "observa a una persona en la vía pública previo al ataque, esta persona se dio vuelta, me miró, sacó el celular en el cual buscó una foto, percatándome que era una foto mía", señaló la fiscal.
Fue en ese momento cuando se abalanzó sobre la enfermera para herirla inmediatamente con el elemento cortopunzante.
A pesar de eso, Pola Álvarez, pensó que se trataba de un asalto por lo que lanzó su mochila al atacante, señalándole que se llevara lo que tenía.
En definitiva, recibio 11 estocadas antes de ser ayudada y atendida en el recinto médido donde trabaja.