Un millonario robo en una bodega que almacenaba ropa de lujo en San Bernardo dejó al descubierto la compleja operación de una banda criminal liderada por Mario Cofré Gutiérrez, de 52 años. Lo que diferencia este caso, es que la agrupación contaba entre sus integrantes a dos carabineros en servicio activo, quienes utilizaron su uniforme, armamento y un radiopatrullas para simular un allanamiento y perpetrar el delito.
De acuerdo con la Fiscalía Occidente y la Policía de Investigaciones (PDI), los hechos ocurrieron cuando el entonces cabo primero Jorge Ignacio Ortiz, acompañado de otro carabinero, llegó a la bodega en un radiopatrullas oficial.
Tras simular un procedimiento policial, facilitaron el ingreso de la banda al lugar. La operación fue liderada por Cofré, quien monitoreó y dirigió el robo desde el exterior.
El registro de cámaras traseras del radiopatrullas, que los imputados desconocían, permitió registrar los movimientos sospechosos. Las imágenes muestran a Cofré llegando al lugar y coordinándose con el cabo Ortiz. En pocos minutos, los delincuentes que ya estaban dentro de la bodega comenzaron a usar herramientas como esmeriles para sustraer especies de alto valor.
El robo alcanzó un botín estimado en 300 mil dólares en mercadería de lujo. Según las investigaciones, Cofré reclutaba a los carabineros ofreciéndoles dinero y parte de los bienes robados.
Ambos carabineros, pertenecientes a la Subcomisaría de Cerrillos, fueron expulsados de la institución. En tanto, hasta el momento, cuatro integrantes de la banda han sido detenidos, incluido su líder, Mario Cofré, quien deberá volver a la cárcel, donde ya ha pasado 25 años, casi la mitad de su vida.