Un edificio en Las Condes lleva más de 30 años realizando una gran labor para sus trabajadores: regalándoles una cena de fin de año, donde ellos solo deben sentarse y disfrutar de lo preparado por vecinos y vecinas.
Incluyendo a conserjes, mayordomos, auxiliares y otros, la zona se caracteriza por hacer actividades y regalos para las personas que todo el año trabajan en el mismo.
Uno de ellos es Alejandro Loaiza, quien es auxiliar desde hace más de tres décadas en el inmueble, y relató cómo la comunidad todos los años se organiza en favor de ellos.
"Siempre lo hacíamos en restaurantes, pero hace un par de años lo hacemos en el quincho del edificio", aseguró a LUN.
Asimismo, destacó que "todos nos llevamos muy bien. El árbol de Navidad está lleno de regalos, cada trabajador se lleva más de 40".
Otro conserje es Rodrigo Suazo, trabajador hace poco más de cinco años, afirmando que "algunos reciben más regalos que otros, también hay personas que nos dan un sobre con dinero".
"Uno se siente más querido. Me siento bien vuando repiten este tipo de gestos: realmente estas acciones reconocen el trabajo de uno", sentenció.