Chile dispondrá de sirenas que alertarán la llegada de tsunamis a las costas nacionales, con el fin de advertir a la población sobre los riesgos de este fenómeno.
La iniciativa se enmarca dentro de la creación del Sistema de Alerta de Tsunamis, buscando implementar un procedimiento de alerta, notificación de los eventuales riesgos y procesos de evacuación de tsunamis, por medio de la instalación de sirenas alrededor del borde costero.
Asimismo, la idea es tener entre 850 y 1.000 sirenas a lo largo del territorio. Las sirenas están equipadas con cámaras y estaciones meteorológicas, además incluye un sistema de comunicación redundante y centros de control a nivel regional y central.
El proyecto involucra el trabajo de diversas instituciones, siendo la primera involucrada el Centro Sismológico Nacional de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemática de la Universidad de Chile, quien se encarga de entregar información sobre la actividad sísmica que ocurra en el país.
Para ello cuenta con instrumentos de detección de movimientos sísmicos distribuidos a lo largo del territorio nacional, los que envían sus señales a un centro de análisis donde se realiza el proceso y diseminación oportuna de la información -en menos de 5 minutos- tanto al Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SENAPRED), como al Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA), siguiendo los acuerdos establecidos en el Protocolo de Actuación Conjunta.
Sergio Barrientos, director del Centro Sismológico Nacional, explicó que "este nuevo Sistema de Alerta se considera como un complemento a los sistemas de notificación que dispone el SENAPRED para hacer llegar oportunamente la información a la población, e impactar positivamente el funcionamiento conjunto de las instituciones encargadas de las emergencias nacionales".
De igual manera, la investigadora del Departamento de Geología U. de Chile, Valentina Flores, expresa que, si bien el sistema anunciado es “valorable”, porque podrá despachar información inmediata a la ciudadanía para una rápida toma de decisiones de evacuación, es importante que venga acompañado de un mejoramiento del sistema de monitoreo de boyas de la Armada de Chile en alta mar disponible a la fecha.
El investigador del Programa Riesgo Sísmico de la Universidad de Chile, Mauricio Fuentes, dijo que "aún quedan detalles por esclarecer, pero el sistema de notificación es parte crucial de la cadena de operaciones de un sistema de alerta, y cualquier fortalecimiento en uno de sus eslabones es una mejora al sistema completo. Esto representa un avance en una de las áreas más importantes, que es comunicar a la población la amenaza, lo que se integra a la actual red, incrementando el número de estos dispositivos".
Por otro lado, Pablo Heresi, académico del Departamento de Ingeniería Civil de la Universidad de Chile, argumentó que “estas torres deben ubicarse a lo largo de todo el borde costero, con alta redundancia en los lugares más poblados y con más turismo. Además, deben tener acceso a electricidad, ya sea a través de la red o con generadores propios en caso de que se caiga la red eléctrica. Asimismo, su diseño debe resistir totalmente sin daños ante posibles terremotos, ya que una alarma destruida no será capaz de alertar a la población. Finalmente, es necesario un mantenimiento continuo, con el fin de garantizar su operatividad al momento del tsunami”.
Además, el profesor añadió que la licitación apunta directamente hacia allá, entregando una concesión a 20 años, tanto para la construcción como para el mantenimiento del sistema de alerta.