Un fuerte contingente policial fue desplegado en el Cesfam Raúl Silva Henríquez, ubicado en el sector de Bajos de Mena, luego de que los trabajadores fueran amenazados de muerte por los mismos delincuentes que esta madrugada perpetraron una fatal balacera en la comuna de Puente Alto.
Así lo determinó el delegado presidencial de la región Metropolitana, Gonzalo Durán, tras sostener una reunión con el alcalde Germán Codina, determinado establecer un punto fijo de Carabineros en el frontis del recinto asistencial por al menos 30 días.
La extrema medida de seguridad fue solicitada también por los propios funcionarios y funcionarias del Cesfam Raúl Silva Henríquez, luego de que fuesen amenazados de muerte por atender a los hermanos de 11 y 13 años que llegaron heridos producto de la balacera.
"Lamentablemente hemos sido víctimas de amenazas de muerte por las personas de afuera. Anoche, alrededor de las 03:00 o 04:00 de la mañana llegaron heridos de bala por una balacera que se produjo en el sector, y también llegó gente amenazando con ametralladoras a los funcionarios es que aquellas personas que habían traído (niños víctimas de balacera) eran salvadas", sostuvo uno de los trabajadores a 24 Horas.
Es importante recordar que los antecedentes proporcionados por la Policía de Investigaciones (PDI) y la Fiscalía establecen que al menos 4 sujetos que transitaban a pie perpetraron más de 150 disparos en contra de personas que estaban reunidas para un velorio.
El tiroteo concluyó con un menor de 17 años de edad fallecido en el sitio del suceso y con dos hermanos, de 11 y 13 años, un niño y una niña respectivamente, con lesiones graves e internados en el Hospital Sótero del Río, recinto asistencial donde fueron derivados desde el Cesfam Raúl Silva Henríquez.
Dadas las características de las amenazas, los trabajadores optaron por cerrar el recinto médico, evitando el ingreso de toda personas, incluyendo a pacientes.