Este viernes una lamentable noticia enlutó a la familia del programa humorístico, "El Chavo del 8".
Rubén Aguirre, insigne comediante que interpretó por años al recordado "Profesor Jirafales", entre otros tantos personajes junto a "Chespirito" y todo el elenco, falleció a los 82 años como consecuencia de una diabetes.
Verónica Aguirre, hija del actor, conversó desde Puerto Vallarta con el programa "Buenos Días a Todos" para hablar de su padre, su legado y su memoria.
"Estamos muy tristes y a la vez muy orgullosos por tantas muestras de cariño de ustedes, ahora si que es una situación complicada", expresó Aguirre tras conocerse el fallecimiento de quien interpretara al recordado "Lucas" en "los Chifladitos".
Sobre el cariño que el pueblo chileno le tenía a Rubén Aguirre, su hija dijo que él estaba consciente de ello y que pudo constatarlo desde siempre: "Lo pude ver con mis propios ojos, el siempre se expresaba de maravillas de Chile. Recorrió palmo a palmo con el circo y primero con el grupo. Fueron experiencias increíbles, decía que la gente invadió la pista y el avión no podía aterrizar"
"Le gustaba mucho Chile y yo tuve la oportunidad de acompañarlo en 2011 y comprobamos el cariño de la gente", agregó Aguirre.
"Siempre fue muy buen amigo de todos"
La hija del fallecido artista también explicó como fue la postura de Aguirre ante los conflictos del ex equipo.
Conocidas son las diferencias que tuvieron varios miembros del elenco con Roberto Gómez Bolaños y las disputas que siguieron tras el término del programa.
"Él nunca se manifestó de un lado o de otro. Su mayor cariño fue para Edgar Vivar porque fueron amigos dentro y fuera de la serie, sentía un gran respeto por Roberto, su primer compañero y siempre fue conciliador y fue pro en que no hubiese conflictos", afirmó la hija del actor.
"Hemos recibido cientos de llamadas luego de lo que pasó", agregó Verónica.