El tsunami de 2010 lanzó al dique flotante Young sobre el molo de la Base Naval Talcahuano, lo que retrasó en más de un año la mantención periódica a la que estaba siendo sometido el submarino Simpson desde marzo de 2009.
Tras terminar su recuperación, y reponer y modernizar buena parte de sus equipos internos, el sumergible volvió al servicio de la Armada.
Un equipo de 24 Horas estuvo abordó del Simpson y fue testigo de su primera navegación tras un largo proceso de reparación.