Hasta la casa museo del ex Presidente Eduardo Frei Montalva llegó este miércoles el ex juez español Baltasar Garzón, a reunirse con el senador y ex Mandatario Eduardo Frei Ruiz-Tagle.
En la instancia, ambos se refirieron a la detención del dictador Augusto Pinochet en Londres, en 1998, cuando precisamente Frei era el jefe de Estado de Chile.
Consultado por la prensa si se arrepiente de todas las acciones realizadas para que Pinochet volviera a nuestro país, el parlamentario aseguró que mantiene lo dicho y ejecutado en ese momento.
"Yo mantengo todos mis dichos. Yo no me arrepiento de las cosas que hice y creo que correspondía a las decisiones que había que tomar en ese momento", expresó.
En la misma línea, Frei indicó que "es muy fácil 20 años después decir que hay que hacer esto o lo otro. Lo importante era hacerlo en ese momento y creo que correspondía a lo que eran los acuerdos internacionales de Chile y tratados".
Garzón, quien precisamente promovió la detención del general en esa época, bajó el perfil a las gestiones realizadas por el gobierno chileno.
"Fue una decisión dentro de lo legal y lo importante era el enjuiciamiento. Si ese enjuiciamiento se produce en el país donde se han cometido esos crímenes, tanto mejor, porque ahí es donde están las víctimas y las pruebas. Es donde se puede hacer mejor justicia", aseveró.
CASO FREI MONTALVA
Sin embargo, ese no fue el único tema abordado.
También discutieron sobre el caso del supuesto asesinato del Presidente Eduardo Frei Montalva en dictadura, padre del senador y también ex Mandatario.
"Me preocupa que no se active ese proceso y que esté sufriendo una dilación en los últimos tiempos (…) Son hechos que por su gravedad, desde mi punto de vista, participan de lo que fue el plan criminal diseñado en este país en la dictadura. Por tanto, no pueden prescribir", indicó Garzón.
Frei, por su parte, dijo esperar que este encuentro sirva para que "definitivamente se aclare el caso del Presidente Frei, porque esta no es una batalla de la familia ni un grupo de personas. Es el único Presidente de Chile que ha sido asesinado".
"El país y también la comunidad internacional que defiende los DDHH piden que se aclare definitivamente quiénes fueron los autores materiales e intelectuales de ese asesinato", sentenció.