Los vecinos de las comunas de La Estrella y Litueche, en la Región de O’Higgins, están en estado de alerta por la construcción de una planta de crianza de cerdo. Denuncian que el sector está saturado y contaminado por este tipo de industrias, y que la llegada de otra empresa haría colapsar sanitariamente la zona.
Sus habitantes, silentes por mucho tiempo, ahora levantan la voz por lo que ellos consideran es un abuso. Una empresa pretende instalar una nueva planta de crianza de cerdos.
Una de las principales opositoras es Rosa Cornejo, presidenta del Consejo de Defensa Medioambiental de la zona. Ella ha organizado a los vecinos, principalmente del sector de Pulín, para evitar que esta nueva planta aumente el malestar y la depreciación de la calidad de vida, que de un tiempo a esta parte han sufrido quienes no viven de la crianza y faenación de cerdos y aves.
El proyecto de la firma Maxagro consiste en edificar en el sector de Quebrada Honda una planta para la crianza de cien mil cerdos.
Israel Cornejo, uno de los más antiguos habitante de Pulín, mira con preocupación la iniciativa. La planta quedaría a unos metros de su propiedad y teme que el mal olor y las moscas invadan toda su casa. En su horizonte no habrá más comidas al aire libre, ni el frescor de la mañana.
Juan Reveco, parcelero del sector, comenzó su propio emprendimiento turístico, construyendo un camping en uno de sus terrenos. Como él, los que llevan más tiempo en la zona temen que la planta les quite lo más preciado para ellos: el agua.
Los habitantes de Litueche, la Estrella y San Pedro, reclaman que la zona ya está saturada de plantas de crianzas. Literalmente se sienten el patio trasero de la sexta región, donde las grandes corporaciones industriales de alimentos pueden hacer y deshacer.
Acusan, por ejemplo, a Agrosuper de haber construido una verdadera ciudadela reproductiva y criadora, sobre la base de subterfugios legales.
Si las moscas y los malos olores provocados por una megaplanta que se ubica a casi siete kilómetros de Pulín ya les ha generado un gran problema a sus vecinos, ellos dicen que la presencia de otra sólo a dos kilómetros de sus casas podría hacer colapsar sus vidas.