La Superintendencia de Educación reveló los detalles del Primer Informe Nacional sobre Expulsión Escolar, instancia que pretende dimensionar los alcances que tiene el tema para la situación de aprendizaje en el alumnado.
El resultado más importante del informe afirma que el 27% de los estudiantes expulsados durante el 2015 finalmente perdió el año escolar.
La publicación detalla que un 17% de los jóvenes erradicados durante el año pasado no se volvieron a matricular en el mismo período, mientras que un 10% hizo el cambio, pero repitió de curso.
Respecto a las causas de las conclusiones, destacan dos áreas: disciplina y violencia.
Un 62% de las decisiones se produjo debido al no cumplimiento de "sanciones aplicadas por los establecimientos", las cuales "obedecen a la acumulación de faltas disciplinarias por problemas de adaptación a las normas de la escuela, como hablar por celular, molestar a compañeros o gritar en la sala", según publica la Superintendencia.
Asimismo, el 31% se vincula con "violencia y riesgo, entre las que predominan la de agresión entre pares y, en menor medida, las de hurto, porte de armas y consumo de marihuana, cigarros y/o fármacos, entre otros".
Finalmente, el organismo especificó que, con un 58% de los casos, la mayoría de las cancelaciones de matrícula provienen desde establecimientos particulares, 34% de municipales, 5% de particulares pagados y un 3% de de Administración Delegada.
Para ver mayor detalle del estudio, puedes revisar a continuación: