Aunque fueron cuatro las compañías de Bomberos que acudieron hasta la ladera del cerro Lintz de Puerto Montt, ninguna llegó a tiempo para evitar que los gemelos Jeremías y Jezrael Vidal Hernández, de tres años fallecieran calcinados.
Ambos menores fallecieron en una de las habitaciones del segundo piso, donde se encontraban solos luego que la madre abandonara la vivienda para ir al baño ubicado en el exterior.
La familia de los niños denunció el escaso acceso de los operativos de emergencia en estos casos, y ahora no fue diferente ya que Bomberos no pudo llegar hasta el extremo del pasaje, que está ubicado en la ladera norte del cerro.
Las juntas de vecino habían advertido con energía el peligro de las viviendas frente a las cámaras de 24Horas.
Más de 400 familias viven en zona roja o de alto riesgo como el caso de la familia de los gemelos fallecidos, todos se han instalado por las laderas de varios cerros, como el de Angelmó, el Mac Iver y el Lintz.
La mayoría se cuelga del tendido eléctrico, lo que representa un alto nivel de exposición en estas viviendas de material ligero.
Consciente del riesgo inminente algunos han optado por irse de la ladera, aunque aún queda un grupo importante de familias a la espera de subsidios habitacionales.
Lo curioso es que la familia de los gemelos fallecidos, aunque lleva instalada en el lugar varios meses aún, no figura en los catastros del Serviu para optar una mejor opción habitacional.