Chile sigue consolidándose como una nación que aporta a la búsqueda de soluciones de carácter global, destinando esfuerzos a la investigación en torno al cambio climático y la conservación de los océanos.
Recientemente, la Presidenta Michelle Bachelet anunció que serán creados dos parques marinos, uno en el archipiélago de Juan Fernández de 13.190 km2 y otro en la zona de Cabo de Hornos e islas Diego Ramírez de 100 mil km2, los que permitirán que el país sume 1 millón de kilómetros cuadrados de mar completamente protegidos.
A eso se suma que esta última zona, junto con el Parque Omora y la isla Hornos, cuenta ya con una red de monitoreo del cambio climático que mide variaciones meteorológicas, y de la flora y fauna locales. Esta información es transferida a una red chilena y otra internacional que permiten analizar los efectos del calentamiento global en todo el orbe.
El país además contará a futuro en Puerto Williams con el Centro Subantártico Cabo de Hornos, donde se desarrollarán aspectos como ciencia, educación, conservación y turismo sostenible, y servirá para cautelar también la ampliación de la Reserva de la Biosfera de Cabo de Hornos en 200 millas náuticas y la creación de una zona marina protegida en el paso de Drake. Esto permitirá generar una pesca responsable y potenciar el turismo de navegación ya existente, principalmente en la zona de glaciares y la Antártica.
Todas estas iniciativas son parte de los compromisos voluntarios asumidos por Chile para proteger los océanos en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles de la ONU.
Para vincular a la ciudadanía con la iniciativa y visibilizarla de mejor manera, se inauguró en el Ministerio de Relaciones Exteriores una muestra al respecto, donde se exhibe la maqueta del futuro Centro Subantártico Cabo de Hornos. En esa oportunidad, el embajador Isauro Torres, director de Medio Ambiente y Asuntos Oceánicos de la Cancillería, sostuvo que “nos felicitamos de estar asociados a un proyecto que tiene múltiples dimensiones. Por cierto, no sólo estamos hablando de una dimensión científica, también estamos hablando de una económica, puesto que permite que haya un turismo absolutamente responsable, sostenible”.
Para Myriam Gómez, Directora Ejecutiva de Imagen de Chile, la Reserva de Cabo de Hornos está contribuyendo a promover nuestra imagen país. “Este archipiélago se destaca a nivel mundial por sus singularidades ecológicas y porque allí se encuentran los ecosistemas forestales más australes del planeta y una de las áreas silvestres más prístinas del mundo. Estas singularidades convierten a nuestro territorio en un verdadero laboratorio natural para el desarrollo de las ciencias, generando un potente atributo diferenciador de nuestro país a nivel global”, destacó.
A su vez, Ricardo Rozzi, director del Programa de Conservación Biocultural Subantártica, expresó que “con esta labor se fortalecerá la conservación biocultural que están realizando la Universidad de Magallanes, la Fundación Omora, el Instituto de Ecología y Biodiversidad y la Universidad de North Texas en la eco-región Subantártica de Magallanes desde el año 2000. Y es un aporte que hacemos desde el sur para todo el mundo y que pone a Chile como un ejemplo de desarrollo sostenible”.