Mientras efectivos de seguridad dedican su tiempo a dar con el paradero del depuesto presidente, Viktor Yanukovich, otros miembros de la policía ucraniana buscan el perdón de los participantes de las manifestaciones.
En un video difundido en Internet, miembros del cuerpo antidisturbios de la ciudad de Lvov se arrodillaron para pedir perdón y para jurar que siempre se mantendrán junto al pueblo.
En el acto público, los integrantes del escuadrón conocido como "Berkut" decidieron hacer un "mea culpa" y se pararon frente a un grupo de manifestantes que respondieron a las disculpas lanzándole monedas y otros objetos.
Durante el evento, los policías se pusieron de rodilla y aseguraron que desde ahora se mantendrán firmes junto a los ciudadanos y no con el Gobierno como en un principio.
El jefe del escuadrón antidisturbios de Lvov aseguró, asimismo, que ningún miembro de su grupo participó en las violentas protestas contra el Gobierno de Yanukovich, en la que más ochenta personas murieron.