Un barco de una ONG holandesa equipado para realizar abortos tenía previsto llegar este jueves a Guatemala para asistir gratuitamente a las mujeres que quieran poner fin a un embarazo no deseado, anunció este jueves la organización Women on Waves.
En Guatemala el aborto sólo está permitido en los casos en que está en peligro la vida de la madre, indica la organización, que cifra en 65 mil los abortos ilegales y en condiciones peligrosas que se llevan a cabo cada año en el país centroamericano.
El barco se instalará en el puerto de San José, a unos 100 kilómetros al sur de Ciudad de Guatemala, y se quedará allí durante cinco días para llevar a cabo abortos en aguas internacionales, indicó un comunicado.
"El barco puede proporcionar abortos legales y gratuitos a mujeres que están embarazadas de hasta 10 semanas tras situarse en aguas internacionales", añadió la organización, que también ofrece asesoramiento para mujeres.
Las mujeres que quieran abortar recibirán dos pastillas que provocan un "aborto médico" considerado seguro y efectivo por la Organización Mundial de la Salud (OMS), dijo la ONG con sede en Ámsterdam.
En Guatemala, 21.600 mujeres ingresan cada año en un hospital con complicaciones relacionadas con el aborto, y los procedimientos realizados en malas condiciones son la tercera causa de mortalidad materna, indica Women on Waves, entidad creada en 1999 y cuya acción no está exenta de polémica.
La fundadora, Rebecca Gomberts, confirmó que el viaje a Guatemala es el primero desde 2012, cuando la marina marroquí impidió la llegada del barco al país norteafricano.
Gomberts dijo el miércoles por la noche, desde Guatemala, que el equipo estaba "muy nervioso" preparándolo todo para que la operación sea un éxito.
La organización subraya que los abortos médicos se realizan en aguas internacionales, por lo que "no se viola la ley sobre el aborto de Guatemala".
En los últimos años, el barco de Women on Waves ha viajado a Irlanda, Polonia, Portugal y España, levantando protestas de los grupos antiabortistas, pero la organización asegura que "especialmente desde la crisis del zika, el acceso a un aborto seguro es ante todo una cuestión de justicia social".
La ONG también pidió al gobierno de Guatemala que "despenalice el aborto" explicando que se trata de "un procedimiento médico estándar y de un derecho humano".