Chile colocó el martes deuda en los mercados internacionales por unos 2.000 millones de dólares, mediante la reapertura de una emisión en euros y la oferta de un nuevo bono de la divisa estadounidense a 30 años plazo.
En una primera operación, el Gobierno chileno realizó la reapertura de un bono por 700 millones de euros, con un rendimiento del 1,534 por ciento y posteriormente ofreció deuda por 1.243 millones de dólares, con un retorno del 3,869 por ciento.
El país sudamericano, que debe enfrentar compromisos en materia social en medio de un débil crecimiento, consiguió en los papeles en dólares un nivel de 100 puntos base sobre los títulos de referencia del Tesoro de Estados Unidos.
Para la reapertura del bono en euros, en tanto, obtuvo una tasa mid swap más 50 puntos base para los papeles con vencimiento al 2030.
Los bancos de inversión Goldman Sachs, HSBC y JP Morgan actuaron como líderes de las operaciones.
Chile, cuyas calificaciones Aa3/AA-/A+ son las mejores para una deuda soberana dentro de América Latina, ha sido golpeado en los últimos años por la debilidad de los precios de las materias primas, en particular del cobre, del cual es el mayor exportador del mundo.